Joseba Lopezortega /
El festival bilbaíno Musika Música 2018 se instala en el siglo XX ofreciendo un programa protagonizado por los compositores rusos (Shostakovich, Prokofiev, Rachmaninov) y nórdicos (Nielsen y de modo muy destacado Sibelius). Ravel, Falla, Respighi o Guridi representan el espacio meridional de la creación en el periodo, y los compositores centroeuropeos sitúan el brutal impacto que el mandato nazi tuvo sobre la sociedad y la música en Alemania y su zona directa de influencia: Schoenberg, Korngold, Kreisler, Berg o Bartok fueron víctimas del nazismo y en su mayoría se vieron abocados al exilio. Obra de otras procedencias tienen una presencia casi simbólica y vienen a recordar la extensión y diversidad de la música del primer tercio del siglo XX. Con mayor o menor intensidad o enfoque, el periodo que enmarca la edición es Entreguerras, como se anunciara en la clausura misma de la edición anterior.
Las dos orquestas vascas con sus directores titulares por vez primera en Musika Música
Las sinfónicas vascas acuden al evento con sus directores titulares, Erik Nielsen con la Sinfónica de Bilbao y Robert Treviño con la Sinfónica de Euskadi. Que los dos maestros coincidan en Musika Música es un verdadero hito e ilustra la creciente importancia que, más allá del tradicional caracter multitudinario y popular de la cita, se está alcanzando en términos musicales. Además de las sinfónicas vascas acuden un año más la Sinfónica de Galicia con Andrew Litton, Ciudad de Granada con Ros-Marbá, Sinfónica de Navarra con Carlos Domínguez-Nieto y Sinfónica de San Petersburgo, con su titular Alexander Dmitriev. Como curiosidad, esta orquesta rusa hará la Séptima de Shostakovich, sinfonía que estrenó en el mítico concierto interpretado en la Leningrado sitiada durante la Segunda Guerra Mundial. Entonces se llamaba Orquesta de la Radio de Leningrado.
Regresa Lucas Macías con la Camerata Royal Concertgebouw Orchestra
El resto del programa ofrece un amplio catálogo de formaciones de cámara y solistas, y da cabida a numerosos artistas vascos, una de las señas de identidad de Musika Música. Entre las formaciones de cámara destaca el regreso de la Camerata Royal Concertgebouw Orchestra con Lucas Macías, que regresa al festival tras su éxito hace dos años, y la Orquesta de Cámara de Europa, que acude a Bilbao con Matthias Pintscher, un director de gran interés.
El festival se abre con Kullervo, de Sibelius. La exigente parte coral la hacen Coral de Bilbao y Easo Abesbatza, y los solistas son la finesa Johanna Rusanen y el barítono norteamericano Kevin Greenlaw. La orquesta será la Sinfónica de Bilbao, en su papel de principal anfitriona, y dirigirá como se ha mencionado Erik Nielsen. El maestro titular de la BOS afronta este compromiso nada más dirigir Salomé en la temporada de ópera de ABAO-OLBE y se consolida como uno de los protagonistas de la temporada musical bilbaína.